A veces vivimos sin vivir, como muertos, con amores que nos quitan la vida. Vivir así no tiene sentido.

¿Te apegas a las cosas y a las personas?

El apego es falta de amor a ti mismo, es buscar el cariño que te faltó ayer, es darle a las relaciones la responsabilidad de lo que te pasa y te falta.

Dejar partir el pasado, enterrarlo, hacer duelo a las relaciones, a las expectativas, a los sueños, a todo lo que idealizamos de la relación con esa persona, nos permite tener más energía para vivir y celebrar la vida en cada instante en el presente.

La muerte es tabú, se le tiene miedo a la muerte porque se teme a la vida, posponemos vivir como si fuéramos a ser eternos para siempre.

Estamos tan ocupados con el pasado, dolidos por lo que paso, o no paso, y tan distraídos con el futuro que perdemos lo más valioso del presente. ¡La vida es ahora!!!!

Cuando estamos divididos interiormente, vivimos en conflicto, proyectando al exterior nuestra guerra interna, con lucha, queja, resentimiento y sufrimiento.

Si somos capaces de enfrentarnos a las perdidas, una parte nuestra muere y da impulso para dejar que otra nazca, es cuando abrimos una incomparable y nueva dimensión en nuestro interior, aceptando con sabiduría las cosas y podemos despedirnos de las relaciones que se van y darles la bienvenida a las que llegan.

¡No hay mal que por bien no venga!

Que una relación se acabe, no tiene por qué ser mala suerte, todo lo contrario. En el amor, no depende de tener buena o mal suerte, son solo aprendizajes que la vida nos brinda, ¡detrás de una perdida hay siempre un regalo!…

Detrás de todo aquello que puede parecernos doloroso hay una recompensa, que a veces nos cuesta ver.

Si alguien no te quiere en su vida, sácalo de la tuya, y dale las gracias por ello. No lo hagas una tragedia, acéptalo, haz el duelo y sigue tu camino. Es importante que cerremos relaciones, capítulos de nuestra vida.

Que se acabe una relación que no funciona, no te nutre, no te hace feliz, y no te quiere bien, darte cuenta y salir de ella, es un gran golpe de suerte, de lo contrario es vivir muertos. Alégrate de que se termine.

Saber despedirnos con gratitud de las personas y cosas queridas es la clave que nos da paz y disponibilidad, para recibir lo que está por llegar. ¡Es un RENACIMIENTO!!!

Si estás en uno de los siguientes procesos…

  • Estás en un momento de cambio o pérdida (duelos, divorcio, muerte, trabajo, enfermedad…)
  • Te duele y te cuesta dejar atrás tu pasado
  • Estás harto de sufrir por amor y te apegas a las cosas o a las personas
  • Quieres hacer un cambio profundo en tu vida, y apuestas por relaciones de AMOR y PLENITUD, si quieres renacer y engancharte a la VIDA

 

Madhu Román

Fundadora de la escuela Namasté · Terapeuta sexual y de pareja
Asesora y mediadora familiar · Maestra de Tantra
Coach · Renacedora · Consteladora familiar
Profesora de Yoga y Masaje Tántrico · Maestra de Reiki
Conferenciante
Escritora. Autora de los libros:
“La pareja, Un viaje mágico” y
“Amores que unen & Amores que atan”