El AMOR es algo tremendamente atractivo y revolucionario. Relacionarte de forma auténtica y abrir tu corazón es a veces como quedarte desnudo ante el otro.

Cuando decides mostrarte y ser tú mismo, conlleva enfrentarte a tus miedos, inevitablemente se produce una revolución interior potente y necesaria.

Si quieres relacionarte desde el alma y acceder al centro del Ser de otra persona, tendrás que permitir que también ella acceda a ti sin máscaras ni maquillaje, tendrás que volverte vulnerable, estar abierto y dispuesto a ser visto. Es un riesgo si, porque nunca sabes qué puede pasar si te conoce por dentro, la vida es arriesgarse, cuanto más arriesgas más te llevas.

El AMOR no tiene miedo de ser descubierto, y que el otro conozca todos tus secretos. Una vez que te dejas descubrir empiezas a sentirte libre. El miedo es el que te impide relacionarte desde tu ser más auténtico y ser feliz.

Cuando hay miedo, es que tu personaje te tiene atrapado y juegas a ser quien no eres, tienes mucho miedo de no gustar, no ser querido, validado, abandonado…

Hay parejas que han vivido juntos muchos años, pero no han llegado a conocerse realmente, se relacionaron desde el ego y sus personajes, no desde el centro de su Ser.

“Para amar hace falta coraje y tener un espíritu celebrativo”

Cada día se nos dan distintas oportunidades para cerrarnos o abrirnos, es una elección. Hay muchos caminos que nos ayudan a poder ser auténticos sin miedos, uno es la meditación.

A través de la meditación podemos empezar a entrar en contacto dentro de nosotros.

Un abrazo

Madhu Román